El álbum de tu boda, la mejor idea para conservar tus fotos para siempre.

Voy a ser claro desde el principio, la peor idea que se te puede ocurrir es no pedirle a tu fotógrafo la impresión de las fotos de tu boda.

Sí, entiendo que "necesitas" tener los archivos digitales de esas fotos porque si lo deseas puedes imprimirlas en cualquier sitio, aún así mis años de experiencia como fotógrafo de bodas me han demostrado una y otra vez que eso es totalmente impráctico ya que nunca vas a imprimir por tu cuenta las fotos de tu boda, de hecho muy probablemente terminarás extraviando o borrando por completo esa memoria USB que tu fotógrafo tuvo que acceder a entregarte después de que le insististe que eso era lo único que deseabas.

La mejor manera de conservar para siempre los recuerdos e instantes de uno de los días más importantes de tu vida es imprimiéndolos. En efecto hoy en día vivimos de lleno una era digital que llegó para quedarse, pero eso no significa que no podamos conservar a través de memorias y documentos físicos los recuerdos más importantes de nuestra vida, que a diferencia de los bytes son tangibles y podrán trascender en el tiempo a través de diferentes generaciones en tu familia. ¿O acaso las fotos de tus abuelos estaban resguardadas en un DVD o una USB?

Dicho lo anterior es importante que conozcas las distintas formas de imprimir y resguardar las fotos de tu boda.

La primera es a través de impresiones individuales en los distintos tamaños disponibles, que si bien es la manera más común de hacerlo no es lo más recomendable para las fotos de tu boda dada su fragilidad, esto a menos de que hablemos de la impresión de imágenes en medianos y grandes formatos, que por lo general van montadas en marcos y otros materiales enfocados a su protección y conservación, sólo si fuese de esta manera te recomendaría que eligieras esta opción.

Pero qué pasa si deseas imprimir 100 fotos de tu boda, la opción de enmarcarlas y montarlas en las paredes de tu casa deja de ser viable, por ello es necesario pensar en otra opción y esta son los álbumes o libros fotográficos.

A diferencia de los álbumes fotográficos de nuestros abuelos o bisabuelos, los álbumes actuales no están integrados por fotos individuales montadas sobre cada una de las páginas del álbum, sino que cada página es la impresión de estas imágenes por lo que la experiencia visual es mucho más estética y limpia.

Dentro de los álbumes de boda existen básicamente dos opciones de impresión, la primera, la más económica, es la impresión digital realizada en máquinas de offset digitales, la principal característica de este tipo de impresión es que si usamos una lupa sobre las imágenes podremos ver diminutos puntos que en su conjunto crean la imagen deseada. Otra característica de este tipo de impresión es el papel que se utiliza el cual tiene que ser compatible con el método de impresión, por lo general papel couché o similares, que son papeles delgados o semirígidos como del tipo de una revista en algunos casos estos papeles pueden tener textura o bien algún matiz como el aperlado.

La segunda opción no es tan económica pero en definitiva es muy superior a la anterior, me refiero a la impresión fotográfica, ésta sin duda es la mejor opción para imprimir y resguardar los recuerdos de tu boda, tanto por el tipo de proceso de impresión como por los materiales utilizados en su producción y es que esta impresión es realizada directamente en un papel fotográfico a través de un proceso químico, nada se le compara a ello en cuanto a calidad de impresión, durabilidad y resultados estéticos, ya que cuando abres el álbum o libro fotográfico lo que estás viendo son realmente fotografías.

Ya que sabes esto te recomiendo que durante el proceso de evaluación del fotógrafo de tu boda, le preguntes qué opciones de impresión te puede ofrecer y de ser posible te muestre materiales ya impresos puesto que es la mejor forma de evaluarlo, nada como sentir el grosor y textura de las páginas o ver la luminosidad de las imágenes.

Como sugerencia final te recomiendo privilegiar el recibir un álbum impreso antes que las imágenes en archivos digitales pero si tu presupuesto te lo permite considera contar con ambos.